Me llamo Alejandra Coll Mencos,
desde 2008 lidero el proyecto Asilvestrada.

 

Mi nombre es Alejandra Coll y soy la fundadora de Asilvestrada. Soy una barcelonesa de corazón, pero más allá de la ciudad que me vio nacer, mi verdadera pasión siempre ha sido la naturaleza. Desde pequeña, mis recuerdos más felices están ligados a los bosques de la Cerdaña, donde trepaba árboles, me tumbaba en la hierba y simplemente era parte del paisaje. Fue allí, entre las montañas y los árboles, donde empecé a sentir esa conexión profunda con la naturaleza que nunca me abandonó.

Aunque la vida me llevó por caminos urbanos, y Barcelona se convirtió en mi hogar, siempre sentí que algo me faltaba. Me di cuenta de que, a pesar de estar rodeada de gente y actividad, me sentía desconectada, como si el bullicio de la ciudad hubiese apagado esa voz interior que me guiaba hacia la naturaleza. Necesitaba más que calles, edificios y asfalto. Buscaba algo más auténtico, algo que tocara mis sentidos, mi alma. Entonces entendí: lo que realmente deseaba era rodearme de plantas, animales, texturas y colores, de vida natural.

Asilvestrada nació de esa inquietud. Cuando comprendí que el lugar donde vivo, donde me siento parte de algo, también puede ser un refugio de biodiversidad. Decidí dejar de lado la búsqueda de grandes proyectos en otras ciudades y centré mis esfuerzos en transformar mi entorno inmediato. Formada como jardinera en Barcelona como diseñadora de jardines en Londres, mi objetivo no es solo diseñar, sino ofrecer espacios que te conecten con lo esencial: la vida, la calma y la belleza natural.

Para mí, trabajar con las plantas no es solo una cuestión estética; es una forma de vivir. Es una oportunidad de generar un cambio, de mostrar que la naturaleza puede ser parte integral de nuestra vida diaria, incluso en las ciudades más grandes. Creo firmemente que los espacios verdes son mucho más que un lujo: son una necesidad para nuestro bienestar. Y, como activista en mi campo, mi propósito es dar a cada proyecto un toque personal que refleje esa conexión profunda con la tierra.

Hoy, después de muchos años de aprendizaje, aciertos y errores, quiero acompañarte en tu propio proceso de reconexión. Porque reconectar con la naturaleza no es solo plantar un árbol o cultivar una planta. Es abrir los ojos a lo que ya está a tu alrededor, descubrir esos espacios que pasan desapercibidos, sentir cómo te transformas al estar rodeado de vida. Estoy aquí para ayudarte a crear un entorno que no solo te haga sentirte bien, sino que te conecte con tu propia esencia.

Quiero agradecer a las personas que me han ayudado en esta web:

Fotos mías: Slowkind + Nini Cortadellas
Diseño: Bea Alberti
Consultor general: Ignasi Rifé